Benedicto XVI demandado en la Haya
+Elías
Patriarca del Patriarcado Católico Bizan|mas
Benedicto XVI demandado en la Haya
+Elías
Patriarca del Patriarcado Católico Bizantino
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Leópolis, 17 de septiembre 2011
Ex-Papa Benedicto XVI
Città del Vaticano
Benedicto XVI demandado en La Haya
El 13 de septiembre de 2011 la Agencia de Noticias Reuters informó que víctimas de abuso sexual infantil ejercieron una acción ante la Corte Penal Internacional de La Haya contra los más altos representantes de la Iglesia Católica. Esto concierne a Benedicto XVI (anteriormente Prefecto de la Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe), al Cardenal Sodano (ex Secretario de Estado del Vaticano), al cardenal Bertone y al cardenal Levada. Ante el tribunal se presentó una demanda de ochenta páginas junto a veinte mil páginas de pruebas de los delitos de abuso infantil por las cuales la responsabilidad plena recae sobre la Jerarquía de la Iglesia. Sin embargo, entre los acusados falta el principal culpable, pues en lugar de comparecer ante el tribunal ¡fue beatificado el 1 de mayo de 2011!
La acusación presentada está clasificada del mismo modo que las acusaciones contra criminales de guerra o contra responsables del genocidio de naciones. Sin embargo, se podría suponer que por medio de así llamadas intervenciones diplomáticas no se llevará a cabo ningún juicio. Tales intervenciones ya han silenciado a representantes del gobierno de numerosos Estados. Actualmente, el Primer Ministro de Irlanda alza su voz contra esta diplomacia criminal de ocultamiento de la tiranía sobre los niños, y presentó una acusación contra Usted. Así mismo se presentó una demanda por parte de abogados de víctimas en Bélgica, donde, entre otras cosas, ocurrieron asesinatos sádicos de niños. Existen instrucciones de la Congregación, firmadas por Usted, en las cuales Usted prohíbe revelar crímenes de pedofilia, amenazando con las penas más severas. ¿Qué bien hay en que Usted, hipócritamente, haya pedido perdón a las víctimas de pedofilia durante su visita a los Estados Unidos o a Australia? Usted evadía su obligación de castigar a los principales culpables; Usted los ocultaba y, de ese modo, apoyaba sus crímenes. Se sabe que el Papa Juan Pablo II se reunió personalmente con los más serios criminales de pedofilia y les ofreció distinciones. (Por ejemplo, al Padre Maciel, Fundador de los Legionarios de Cristo, o al Cardenal Law de los Estados Unidos).
Juan Pablo II abrió la puerta al espíritu de Asís —el espíritu del anticristo en la Iglesia. En lugar de penitencia por su gesto apóstata, Usted elevó este espíritu de traición al altar de la Iglesia. De este modo Usted expulsó al Espíritu Santo y atrajo la maldición sobre toda la Iglesia. Todos los sacerdotes que permanecen en unidad espiritual con Usted, como Papa apóstata tras la falsa beatificación, no celebran más la Divina Liturgia ni administran válidamente los sacramentos. Dios ha retirado el sacrificio perpetuo de la Iglesia oficial.
Ahora Usted debe presentarse ante el tribunal de los hombres. Juan Pablo II ya estuve ante el Tribunal de Dios, e incluso Usted estará pronto allá. No sólo todas las víctimas del crimen de pedofilia hablarán allí contra Usted, sino también las almas engañadas que debido a la pseudo beatificación se abrieron al espíritu de Asís —el espíritu del anticristo.
¿Cuál es la solución para Usted? Dios es misericordioso, pero sólo con quienes hacen penitencia. Si Usted la rechaza, rechaza así la misericordia de Dios, comparecerá ante el Tribunal Divino y el castigo caerá sobre Usted según justicia.
¿Qué penitencia debe hacer? Escriba una declaración pública en la cual Ud.:
1) declara nula la beatificación del apóstata Juan Pablo II, quien es el mayor incriminado de los delitos de pedofilia contra la humanidad;
2) remueve de su cargo a todos los cardenales y obispos actuales que están bajo el anatema de Dios;
3) designa a doce hombres católicos ortodoxos para el ministerio apostólico con el propósito de renovar la Iglesia, quienes elegirán a Su sucesor de entre ellos mismos;
4) cancela la celebración prevista del aniversario de la traición de Asís;
5) renuncia a Su cargo y comparece ante el tribunal humano. Acepte voluntariamente incluso el encarcelamiento perpetuo.
Así Usted sentará un ejemplo de arrepentimiento a todos los fariseos y saduceos eclesiásticos que ahora ocupan sus cargos ilegalmente.
Durante los seis años de Su pontificado Le hemos solicitado numerosas veces hacer penitencia por el gesto de Juan Pablo II en Asís, proscribir las herejías y expulsar obispos y teólogos herejes. Usted no ha hecho ninguna de estas cosas. Hemos apelado a Usted, Le hemos implorado, Le hemos escrito docenas de cartas alarmantes y peticiones públicas. Usted tendrá que rendir cuentas ante Dios por todas estas cosas.
Usted todavía tiene la oportunidad de arrepentirse. Estamos escribiéndole estas líneas con el corazón sangrante porque Lo amábamos y esperábamos con esperanza que Usted comenzara la verdadera revitalización de la Igle
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